Trabajar en equipo es un reto para muchas personas: las relaciones interpersonales en situaciones de presión, por las exigencias de la tarea y tiempos de entrega, se tornan conflictivas cuando surgen actitudes negativas entre los miembros del grupo.
Y es que para que un equipo sea efectivo y eficiente debe conciliar las competencias técnicas necesarias para ejecutar la tarea con actitudes positivas que mantengan la armonía y la cohesión del grupo.
Pero es más fácil decirlo que realizarlo.
Varios factores influyen directamente en la integración de los miembros de un equipo: competencias técnicas, responsabilidad, compromiso, solidaridad, madurez, y un largo etcétera, todos igualmente importantes.
Resumo en 3 conceptos claves muchos de los elementos que favorecen la integración de un equipo que busca efectividad.
1. Conocimiento y compromiso con los objetivos.
Cada integrante del equipo debe conocer sobre la empresa o grupo al que pertenece.
Debe ser capaz de responder las preguntas ¿para qué estamos aquí? y ¿cuál es el propósito de esta empresa o grupo?
No me refiero a idealizar la empresa o la misión; es reconocer que el trabajo a realizar proporcionará satisfacción personal y utilidad a la mayoría.
2. Responsabilidad por los resultados: poder de contribución.
Los miembros de un equipo que son conscientes del valor de sus aportes individuales al resultado final toman acción y se responsabilizan por los resultados.
Y si no obtienen el resultado deseado, tienen la capacidad para analizar la situación y hacer los correctivos.
3. Armonía.
No se trata de ser amigos sino de armonizar los distintos roles.
Cuando hablamos de roles en el equipo, nos referimos a la forma en que la persona desempeña su función, las características esenciales de su personalidad y la dinámica del grupo.
Se logra integración en el equipo cuando predominan los roles positivos o de cohesión, los roles de tarea y cuando suprimimos los roles negativos, controlando nuestros demonios internos y poniendo sobre la mesa las conductas positivas necesarias para que el proyecto avance y llegue a feliz término.
Revisemos los roles que pueden surgir en el equipo y su impacto en el desarrollo del proyecto.
👍Roles Positivos o de Cohesión
Son las conductas que mantienen la armonía del grupo y favorecen la integración. Algunos roles positivos son:
- Apoyador: anima a los compañeros; es quien ve siempre el vaso medio lleno.
- Integrador: intenta que todos participen, sobre todo los más introvertidos o callados, cuyos aportes pueden ser muy valiosos.
- Referente: recoge y expone los puntos de vista que se expresan en el grupo. Es quien hace pausas para evaluar el avance y asegurar que todos estén en la misma sintonía.
👎Roles Negativos
Estos entorpecen la integración y la armonía. En esta categoría se pueden observar los siguientes:
- Controlador: convencido que sus ideas son las mejores, desestima las sugerencias e influye a través de la manipulación.
- Obstinado: se opone a todas las iniciativas y siempre encuentra una objeción. Es el típico “eso no se puede” o “eso no va a funcionar”.
- Detractor: siempre busca culpables cuando hay errores, sin proponer soluciones.
- Bufón: el buen humor es necesario, pero quien interrumpe continuamente el trabajo del grupo con bromas, distrayéndolo de sus objetivos, cruza una línea entre la responsabilidad con la tarea y su necesidad de llamar la atención.
El éxito de los equipos de alto rendimiento radica, además de su competencia técnica, en el equilibrio entre roles de tarea y roles de cohesión.
👌Roles de Tarea
Son las conductas que favorecen la cooperación y ayudan a la realización del trabajo.
- Conciliador:
- está pendiente de las necesidades y preocupaciones de los otros, sobre todo en situaciones de tensión y conflicto.
- Operante:
- es el organizador práctico; es quien implementa y transforma las ideas y decisiones en tareas manejables.
- Promotor:
- es quien busca unir ideas, objetivos y cuestiones prácticas en un todo, presionando para tomar una decisión y actuar.
- Creativo:
- se destaca como fuente de sugerencias e ideas originales para el equipo.
- Analista:
- su contribución está en el análisis para proporcionar juicios objetivos.
- hace críticas pertinentes, señala los errores y formula evaluaciones durante el proceso.
- Relacionista Público:
- es el miembro que realiza gestiones para obtener recursos para el equipo.
- pilar para mantener las buenas relaciones del equipo y apoyo a sus compañeros, sobre todo en los momentos de crisis.
- Coordinador:
- es el miembro del grupo que concentra sus esfuerzos en torno a la convivencia del grupo y la consecución de los objetivos.
- es el miembro que vela por el funcionamiento y eficiencia del equipo.
- Líder:
Los integrantes de un equipo reconocerán a un líder que:
- sabe elegir y dirigir a sus colaboradores, delegando adecuadamente atribuciones y funciones.
- tiene la capacidad para tomar decisiones y establecer los objetivos junto con el grupo.
- demuestra seguridad y ofrece apoyo en momentos de tensión.
La integración de un equipo debe ser un proceso consciente y regulado, donde los miembros del equipo deben estar bien calificados para hacer su trabajo y demostrar el deseo de cooperar.